UNAS PALABRAS ANTICARCELARIAS
Lo primero que debemos establecer en este prólogo (porque creemos necesario conozcan nuestro verdadero sentimiento) es que odiamos a la cárcel, deseamos que arda junto con todos sus carceleros dentro, deseamos que se extinga junto con todo aquello que le requiere para existir, aquel juego de dominación en donde el poder asesino nos condena o nos condenará tarde o temprano, pero contra el que estamos dispuestos a enfrentarnos por nuestra libertad.
La cárcel acompaña la historia de la sociedad burguesa desde el inicio de su protagonismo en la historia, esa historia que escriben los poderosos y en la cual nuestra participación se remite solamente a la sujeción de hechos que alteran el orden social. Su finalidad ha sido y es castigar la desobediencia, disciplinar.
El disiplinamiento está normado al igual que toda la horrenda realidad que nos entrega el sistema socioeconómico, ya no somos azotados por amos, ni somos siervos de por vida de un solo señor, no! Ahora servimos voluntariamente y somos castigados por el Estado al revelarnos. La normatividad nos indica que somos desposeídos, que estamos excluidos de la propiedad y por tanto con dos opciones: Producir o amenazar.
Nos educan para la sumisión y el conformismo, nos educan para consumir, trabajar y detestarnos, cualquier acto contrario a la normalidad productiva se entiende como peligroso, anormal, desviado, criminal, antisocial.
Para ello han creado la Cana, para castigar ante cualquier duda que les haga temblar. Nosdespojan de toda autonomía, nos privan de libertad física para vigilarnos y espiarnos las 24 horas, para denigrar incluso a quienes amamos.
Pero a pesar de todo los esfuerzos de lxs despreciables poderosxs y sus perrxs guardianes por quebrarnos, no podrán soterrar nuestra solidaridad, es por esto que nos hermanamos con todxs aquellxs que se sientan inexpugnables, ya sea dentro o fuera de la cárcel, con aquellxs que alberguen en su corazón un odio para esta forma de control del Estado carcelario, con todxs para quien los centros de exterminio deben ser destruidos y no modificados, con todxs aquellos que han sufrido por sus familiares y
amigxs o en carne propia la tortura, la vejación física y psicológica y han despertado al día siguiente sabiendo que no están hechos para arrodillarse.
Este libro es una reedición del texto “Defenderse desde la carcel“ de la autora Ana Isabel Caballero Bellido (CODEPU) y ha sido trabajado de manera autogestionada por individualidades afines que desean difundirlo en la mayor cantidad de cárceles del territorio $hileno con objeto de servir de herramienta para la resistencia y autodefensa de todxs lxs presxs y
prisionerxs del Estado $hileno.
Contiene una serie de resquicios legales sobre el sistema penal que ayudarán en ámbitos tales como las horas de patio que se deben exigir, las necesidades alimentarias y de aseo, o los derechos que tienen las visitas y los requerimientos que los bastardos gendarmes harán para poder concretar el ansiado encuentro. En definitiva es un texto que permitirá exigir y disputar
mejores condiciones dentro de esta realidad de castigo inconmensurable.
Este nuevo volumen lleva por título “Compromiso Delictual” a propósito de la arbitraria ficha con el mismo nombre que nos llenan al ingresar a las malditas cárceles y con la que deciden a que módulo arrojarnos. Pero sin duda el título no es antojadizo, también representa nuestra insumisión. Es por esto que es preciso puntualizar que esta iniciativa no desea bajo ningún
punto de vista validar la idea del derecho tal como lo propone el Estado asesino y sus leyes, mucho menos justificar a través de esta propuesta de defensa, los dispositivos de seguridad creados por El poder, sino muy por el contrario servir de herramienta para la complicidad y la lucha que día a día sabemos se levanta para poder sobrevivir dentro de los horrendos
muros que han puesto entre nosotrxs.
Este libro que tienes en tus manos es un arma de defensa, este texto es sin duda una forma de decirte que no estas solx, que nuestro corazón es negro y que en cada uno de nuestros actos está implícita la venganza.
Algunas Individualidades Anarquistas Anticarcelarias